Este puede ser un momento especialmente difícil para las mujeres con cáncer de mama metastásico  que vivan solas o no tengan el apoyo de una pareja estable. Estar soltera o no tener una persona cercana de referencia, no tiene por qué hacer que padecer cáncer sea más duro, solo tienes otros retos y preocupaciones diferentes.

Si te fijas en tu grupo social, descubrirás que hay más personas dispuestas a ayudarte de lo que pensabas.

Existen servicios de atención sanitaria domiciliaria disponibles para ti si los necesitas, incluso para cosas como proporcionarte un medio de desplazamiento a las citas médicas. Si estás preocupada, busca desde el principio los servicios que tienes disponibles, para quitarte un peso de encima.

Pregunta a tu médico cuáles son tus opciones.

A muchas mujeres con cáncer de mama metastásico, independientemente de su situación vital, les resulta muy útil hablar con un psico-oncólogo o psicólogo.

Si estás saliendo con alguien, es posible que no estés segura de cómo y cuándo compartir con tu pareja la noticia de que padeces cáncer. Confía en ti misma para encontrar el momento adecuado para sacar el tema.

Intenta darle a tu pareja la oportunidad de afrontarlo; no asumas que dejará su relación debido al cáncer. Independientemente de cuál sea su reacción, no es culpa tuya compartir la noticia en un “momento inadecuado”. Quizá te resulte útil practicar con un amigo lo que vas a decirle, antes de comunicarle la noticia a tu pareja.